viernes, 8 de julio de 2011

"REIR PARA VIVIR MEJOR" (Por Yamila R)

Vivimos en un mundo en dónde el estrés, las presiones y los problemas, nos contaminan. Las emociones que la mayor parte del tiempo surgen a la luz son el enojo, la ira, la desilusión, la soledad, la tristeza. La agresividad flota en el aire como el nuevo perfume de las estaciones. Y frente a estas situaciones nos recluimos en de busca vías de escape, como el alcohol, las drogas, el tabaco, el ejercicio, el comer o trabajar en exceso; “medicinas” que logran mantenernos fuera del conflicto sólo por instantes. Cuando los paliativos cesan, los problemas surgen…



Quienes trabajamos al servicio del crecimiento personal, sabemos que la risa es una figura clave en la recuperación del poder personal y en la apertura para la sociabilización.

Es que la risa nos identifica como humanos, y nos acerca a los demás, es nuestro punto de coincidencia. Una equilibrada salud emocional requiere de una dosis de risa diaria, que nos enseñará a descubrir nuestro verdadero ser y nos permitirá conectarnos con los problemas diarios desde un ángulo menos dramático o extremista.

Reír, nos ayuda a entender que la vida es demasiada seria como para vivir con el ceño fruncido o la mandíbula cerrada. La risa es la droga de la felicidad, que nos alivia frente a las situaciones de estrés, combate las emociones tóxicas, estimula nuestra autoestima, pondera nuestro lado creativo, nos impulsa a emprender nuevas alternativas para resolver los problemas cotidianos, y nos enseña sobre nosotras mismas; dado que cuanto más me permito reírme de mí misma, mayor será mi capacidad de aceptarme tal cual soy: una mujer, con fortalezas y debilidades.

¿Cuántas veces te has permitido reírte de esas debilidades que te caracterizan? ¿Cuántas veces has aceptado que los lunes empieza la dieta que termina el mismo lunes? ¿Qué tus celos son el reflejo de tu propia inseguridad y qué sólo aceptándolo podrás hacer algo al respecto? ¿Cómo imaginas que podría ser la vida, si las personas aceptarán sus sombras? Seguramente habría muchas gentes más sonrientes por la calle disfrutando de su propia humanidad.

Reír es una elección que está al alcance de la mano, a la misma altura del “sufrir”; a cada momento tienes la libertad de elegir como sentirte frente a los hechos que se suceden; quizás pienses que es muy difícil con todo lo que ocurre en el mundo sonreír, pero deja de pensar y simplemente: HAZLO.

Simplemente ríe
Comienza por las mañanas cuando te miras al espejo, y reconoces en tu rostro una nueva arruga, o la curva de tu nariz que te disgusta, o el tinte del cabello descolorido; sonríete con la mayor de las sonrisas, y descubre la emoción que ese simple hecho desata en el transcurso del día. Ese será el pasaporte para una jornada plena de vigorosidad.

Recuerda que la risa es una excelente aliada de la buena salud,genera endorfinas, hormonas de la felicidad, combate las tensiones musculares, refuerza el sistema inmunológico, oxigena la sangre, estimula nuestros sentidos, nos predispone para la acción; alivia las tensiones, la angustia, y la ansiedad; y te devuelve la belleza.

"LA GENTE SE SEPARA POR LO MISMO QUE SE ENAMORA" (Por Yamila R)

Los seres humanos siempre queremos cambiar aquellas cosas que nos enamoraron del otro: la actitud seductora –que en un principio nos atrapa pero después nos parece peligrosa-,
la rebeldía–que luego pretendemos que se convierta en burguesía-, la sobre protección afectiva –que al principio nos hace sentir queridos y luego de un tiempo nos ahoga-, y muchas otras conductas que vemos como virtudes durante el enamoramiento y como defectos cuando se va el efecto “anestésico” del romance.

Esto lo explica la psicología al afirmar que siempre elegimos aquello que se nos opone, porque nos complementa, pero que cuando se cierra la puerta a intimidad, en la convivencia diaria, y cuando se diluyen las idealizaciones, empiezan los problemas reales.

Los terapeutas siempre hablan de la posibilidad de “negociar” para lograr una mejor calidad de relación. Ahora, si lo que hay que negociar, si lo que hay que ceder es parte de nuestra esencia, entonces no es a nosotros a quien quieren, sino a una ilusión.
¿Cambiar por amor?
¿Hasta dónde?

Estar abierto al cambio es un signo de inteligencia.
Porque nuestra personalidad no viene de fábrica, sino que se va construyendo a lo largo de la vida y de acuerdo a las circunstancias que nos toca vivir.
Pero, eso si, tampoco es cuestión de dejarla libre a la voluntad de otros.

Tener una personalidad dinámica y flexible también es una manera de reforzar la propia identidad. Si nos sentimos interiormente seguros de nuestras convicciones, no será un conflicto estar abiertos a las señales del afuera para saber cuándo es necesario una pequeña corrección del rumbo.

Siempre podremos ir hacia donde nosotros queremos, si es que lo tenemos claro.

Y tal vez no sea tan importante la ruta que tomemos, si nos lleva hasta la puerta de aquel que amamos.

"CAMBIEMOS NUESTRA FORMA DE PENSAR" (Por Yamila R)

Diariamente se nos cruzan un montón de pensamientos por la cabeza, algunos tan pequeños que en un pequeño santiamén olvidamos. Muchos de estos, aunque ignorados, sonpensamientos negativos que inconscientemente condicionan nuestras actitudes y decisiones.Pequeños pensamientos como un un simple “no podré”.

Debemos aprender a identificar estos pensamientos, no son buenos para nosotras, nos limitan, y si lo intentamos podremos convertirlos en pequeños pensamientos positivos, que nos ayuden a salir adelante.

Se nos cruza por la cabeza que no podremos hacer tal o cual cosa, y ni siquiera lo intentamos, ¿como podrías saber si puedes o no, si ni siquiera lo has intentado? Y luego te quejas de que “todo me sale mal”. Valdría la pena pensar que no todo sale como queremos, pero tampoco todo sale mal, empezando por la ardua tarea de estar vivas, mantener una posición en un trabajo por años, es otra de las señales que no todo sale mal.

Es triste admitir que el pensar negativo es aprendido: lo hemos aprendido muchas veces de una manera directa e inconsciente desde niños, de nuestros padres y personas cercanas a nosotros que jugaron un papel importante en nuestra educación. Tomemos el ejemplo de nosotros, los padres actuales, celebramos los logros de nuestros hijos, pero estamos siempre pensando en lo que otros niños hacen y desearíamos que nuestros hijos estuvieran en ese “primer lugar”.

El camino al éxito, está formado por información, acción y perseverancia. Cada paso, por pequeño que sea, te acerca a la meta. Tú puedes lograrlo.
La pregunta para nosotras mismas sería:

¿si aprendimos a tener pensamientos negativos, por qué no podemos aprender a tener pensamientos positivos?

Los adultos que estuvieron en nuestro entorno durante la niñez, nos educaron de la manera que pensaron era lo mejor, hicieron lo que sabían o podían hacer, equivocados o no, negativos o no, nos dieron lo mejor de si mismos. Ahora debemos tomar lo positivo, desechar lo negativo de todo cuanto hemos arrastrado durante toda una vida. No es fácil, todo comienzo es difícil, pero vale la pena aprender a no dar el mensaje negativo de nosotras mismas, y de no pasarlos a nuestros niños.

Alguna vez trataste de hacer algo y no salió como esperabas, pero piensa que fue una vez, hoy por hoy todo puede ser diferente porque algo que no hayas podido hacer en el pasado, puede funcionarte esta vez. Inventemos un dialogo interno positivo, empleemos todo el tiempo que juzguemos necesario.

Por ejemplo, piensa en las cosas positivas y realistas que le dirías a la persona más querida para sacarla de la negatividad y qué palabras positivas le dirías para convencerla que está equivocada. O piensa en lo que te gustaría que te dijeran para hacerte sentir bien, para apoyarte y convencerte que todo saldrá bien.

Entablemos una conversación con nosotras mismas, tan seguido como sea posible, descubramos nuestras capacidades de hacer lo que nos gustaría, establezcamos proyectos mentales, hagámonos la pregunta a nosotras mismas, ¿qué haríamos? Respondámonos a nosotras mismas, pensando siempre que la persona que no te engaña eres tú misma.

No debemos regir nuestra vida por enseñanzas del pasado, piensa que ahora estás capacitada para entender, corregir y hacer los cambios necesarios para convertir los pensamientos negativos en positivos. Y transmite esos pensamientos positivos a los tuyos para tener una vida mejor. Después de todo, debemos mantener en mente que nadie puede dar, enseñar y/o transmitir lo que no tiene para si misma.

"¿ESPERAS QUE ALGUIEN TE SALVE?" (Por Yamila R)

Muchas mujeres esperan que un día llegue alguien o algo que las salve y que a partir de ese momento todo en sus vidas comenzará a ir bien.

A lo mejor estás esperando esa persona que te saque de tu soledad, pobreza, o de un trabajo que no te gusta. Alguien que te descubra y te catapulte hacia el éxito…

O puede que no sea alguien sino algo. Tu negocio no va bien y tienes todas las expectativas puestas en el siguiente cliente o en un proyecto… ¿Te reconoces?



¿Estás esperando que alguien te salve?
Este tipo de actitud es peligrosa y dañina para tu autoestima.Estás poniendo tu felicidad en manos de otros, en manos de algo que tú no puedes controlar y eso no es razonable ni recomendable. Tan altas expectativas, tantas esperanzas hacen además que si la cosa no funciona, si esa persona no te elige a ti, si el proyecto se lo dan a otra u otro compañero te sientas desmoralizada y amargada.

No te preocupes si te sientes identificada porque este tipo de pensamientos es muy común, quién no ha caído alguna vez en la esperanza de que algo determinado le cambie la vida (la lotería, por ejemplo). Tener esperanza no es malo, pero sí lo es no hacer nada por mejorar tus circunstancias esperando que alguien o algo lo haga por ti.

¿Y qué puedes hacer?
Acepta que la posibilidad de que algo o alguien le de la vuelta a tu vida es prácticamente imposible y decide ser túla que lleve las riendas de tu vida o negocio.
No te derrumbes si las cosas no salen como esperas, siempre habrá otra oportunidad, como dice el refrán “cuando una puerta se cierra otra se abre”.
Empieza a hacer pequeños cambios en tu vida, a trabajar en las cosas que quieres mejorar. No tienes que proponerte imposibles, sino metas realistas que después irás expandiendo.
Date permiso para expresar tu miedo, enfado, amargura o para sentirte mal si quieres pero sólo un ratito, después respira hondo y sigue adelante.
El truco está en seguir adelante pase lo que pase, en levantarte las veces que haga falta, en ser consistente e ir haciendo pequeños cambios y abriéndote a nuevas oportunidades y, poco a poco, lograrás tus metas sin necesidad de ningún salvador. ¿Por dónde vas a empezar?

"¿PARA TI QUE ES LA FIDELIDAD?" (Por Yamila R)

¿Para ti, qué es la fidelidad?
¿Qué es la fidelidad para ti?

¿Se puede ser infiel con el pensamiento? ¿Es malo pensar en otra persona cuando se tiene pareja? ¿Si sólo son pensamientos, crees que importa?

La fidelidad es de cuerpo y es de mente. Así como también es cierto que quien en realidad ama, jamás será infiel…

Debemos ser fieles a nuestras decisiones, a nosotras mismas, y por supuesto, a nuestra pareja. No podemos decir “yo amo a mi novio”, “yo amo a mi esposo”, “yo amo a mi prometido” cuando nuestros ojos miran hacia otros lugares, cuando nuestra alma nos envía una señal de alerta para decirnos que hemos ingresado por la puerta equivocada. Debemos reconocer lo que hay en nuestro corazón, debemos ser transparentes con ello, no sólo por nuestra propia felicidad, sino por la de aquella persona que se engaña al creer que tiene una pareja cuando sólo tiene un bulto de indecisiones que debe llevar en su espalda.

Muchas personas creen que se es infiel cuando se empieza a pensar románticamente en otro ser, es decir, cuando empiezas a fantasear con vivir ciertas situaciones con alguien que no es su pareja, sacando como puntual conclusión que “la carne es débil”.
Otras, dicen que la infidelidad sólo es de corporeidad ysólo acontece cuando te entregas a un o una tercera, puesto que pensar en otra persona sólo se queda en lo abstracto y no llega a materializarse.
¿Cuál es tu versión de la fidelidad? ¿Tú también apeteces convertirte en “filósofa” del amor para cambiar las cosas a tu conveniencia?

Debemos dejar de ser tan acomodadas a las circunstancias parajustificar nuestras malas acciones, debemos ser sensatas y responsabilizarnos de nuestra vida, la infidelidad es de cuerpo y es de mente,¿qué no lo notas? No puedes quitarte el amor como si fuese una ropa, no puedes decir “de las puertas de mi casa hacia adentro soy comprometida, y de las puertas de mi casa hacia afuera soy soltera”. Cuando empiezas a pensar en alguien diferente a tu pareja, cuando tienes relaciones sexuales con alguien diferente a tu pareja, cuando intentas darle celos a un amor del pasado, cuando ocultas tus sentimientos hacia un tercero, no seas cínica, acéptalo…¡eres infiel!

La fidelidad es una expresión del amor, nadie puede amar a dos personas al mismo tiempo: sólo se necesitan dos alas para volar, la tercera ya es una especie de “deformidad”. Tal vez para muchos la monogamia es un cuento pasado de moda y moralista, pero lo cierto es que cuando una persona se adueña de tu corazón, ya no hay espacio para nadie más, puede pasar Tom Cruise por tu lado y tu ni darte por enterada: ¿acaso no recuerdas la primera vez que salías con ese amor que parecía “platónico”? Sólo tenías cabeza para él, para sus palabras, para sonreír como tonta cada vez que recordabas una de sus ocurrencias…

Por ello, sorprende sobre medida que existan mujeres que acepten que sus compañeros sentimentales “piropeen” a otra mujer en sus presencias con el argumento de que “los ojos se hicieron para mirar”. Y es cierto, los ojos se hicieron para “mirar” y no para “ver”, el mirar va más allá del aspecto físico, entonces, ¿en realidad se está mirando? ¿O se está viendo? Y más allá de eso, ¿qué se hace al lado de una persona tan superficial? ¿Qué se hace con una persona que no valora a nadie y sólo se fija en figuras esbeltas? ¿Acaso la belleza física es inmortal?

Como lo hemos dicho en ocasiones anteriores, “el corazón se manda sólo”, pero nosotras no debemos traspasar las barreras del cinismo y el descaro para no asumir las responsabilidades de lo que pasa con nuestros sentimientos.

Podemos cambiar de parecer cuando queramos, pero no tenemos derecho a lastimar a las personas que nos entregan su corazón. Debemos ser sinceras con nuestras parejas, a ellos les dolerá saber que ya no les amamos, pero con el pasar del tiempo agradecerán nuestro gesto, porque en lugar de seguir pisoteándoles, decidimos ser sensatas y honrar el amor que nos regalaron diciendo la verdad, dejando de estorbar en el camino y devolviéndoles la oportunidad de encontrar un nuevo amor que sane sus heridas y viva para hacerles felices, tal y como lo merecemos nosotras.

La infidelidad no sólo va contra los demás, también contra nosotras mismas, quien ama nunca será infiel.

"LA IMPORTANCIA DE SABER RECIBIR APOYO" (Por Yamila R)

Muchas veces, cuando más ayuda necesitamos, cuando más sufrimos y peor nos va, más rechazamos la ayuda que nos brindan.

Recibir ayuda no nos hace débiles, si lo recibimos bien puede hacernos más fuertes y hablar bien de nosotras.

Debemos aprender a ser independientes, pero también a saber recibir una mano amiga.

Los seres humanos fuimos educados en un contexto de independencia falso; en el que nos enseñaron que siempre debemos hacer las cosas “solos y bien”. Y en el intento de cumplir con la premisa nos embarcamos en una ruta de esfuerzos y fracasos; de ensayo y errores, creyendo que la única forma posible de avanzar y aprender es a través de los golpes de la vida. Dicen que vivir es como estar en la escuela, que vinimos a aprender lecciones pendientes, y que los momentos de alegría y esparcimiento son nuestros recreos. Será tal vez por eso que algunos dicen “la felicidad es un ratico”.

Sin embargo dada la evolución alcanzada, los cambios tecnológicos, y los descubrimientos que se revelaron ante nuestros ojos, seguir sosteniendo como una única posibilidad de aprendizaje el sufrimiento es obsoleto.

Me arriesgo a decir que no sólo del miedo aprendemos o de las malas experiencias, o de los errores, también podemos aprender del amor, de todo aquello que nos sale con éxito, de los sueños, de nuestra voluntad, de la capacidad de escuchar, de dar y de recibir.

Y el verbo “recibir” es uno de los verbos menos actuado en la sociedad de nuestros tiempos. Ha merecido mala prensa. Es mejor “dar” que “recibir”, e incluso “dar sin esperar recibir” es un punto extra que se suma en nuestros currículos de buenas personas. Dar, dar, dar; como dijo la Madre Teresa: “Hasta que duela” pero sospecho que en nuestro entorno social, ha sido malinterpretado.

Dar también implica recibir; dar es estar en actitud de apertura, recibiendo del universo su caudal de información, energía, y amor. Es estar atento a lo que ocurre fuera y dentro de nosotros mismos.

¿Por qué crees que no mereces recibir? Esta tendencia al auto-boicot; a desmerecernos, la arrastramos a todos los ámbitos de nuestras vidas. Cómo he dicho en varias oportunidades lo que sentimos lo expresamos en las acciones cotidianas, en nuestra peculiar forma de relacionarnos.

A veces subsumidas en situaciones de estrés, de ansiedad, de peligro incluso, nos alejamos de la mano amiga, benefactora, contributiva, porque hay una voz interior que nos recuerda que “no somos lo suficiente para merecer ese respeto, ese cariño, esas oportunidades”. Nos cerramos a las posibilidades de avanzar, y crecer, por estar mirando atrás, y autocastigándonos.

Saber recibir apoyo no nos hace débiles, por el contrario, nos glorifica; nos hace más humanas, porque nos sitúa en un plano en el que captamos la finitud de nuestros actos; y la incapacidad para con algunas cosas, en la que podemos decir sin temor “con esto sola yo no puedo” y no perdemos glamour, ni estilo; por el contrario ganamos la confía de ser quienes somos.

Tenemos la capacidad de transformar nuestra realidad, depende de nosotras elegir soportar todo el dolor, solas y en silencio, o compartirlo con quienes nos ofrecen su ayuda.

"VOLVER A EMPEZAR" (Por Yamila R)

Estaba necesitando hacer una limpieza en mí...

Tirar algunos pensamientos indeseados.

Lavar algunos tesoros que estaban medio oxidados.

Entonces saqué, del fondo de las gavetas, recuerdos que no uso y no quiero más:

Tiré algunos sueños, algunas ilusiones...

Sonrisas que nunca di. Tire la rabia y el rencor de las flores marchitas que estaban dentro de un libro que nunca leí.

Miré para mis sonrisas futuras y las alegrías pretendidas , y las coloqué en un cantito, bien ordenaditas.

Saqué todo del armario y lo fui tirando al suelo.

Pasiones escondidas, deseos reprimidos.

Heridas de un amigo, recuerdos de un día triste.

Pero también encontré otras cosas y muy bellas :

Un pajarito cantando en mi ventana.

Aquella luna color plata, el poner del sol.

Me fui encantando y distrayendo, mirando cada uno de aquellos recuerdos.

Arrojé en el cesto, los restos de un amor que me hirió.

Tomé las palabras de rabia y de dolor que estaban en el estante, las tiré en el mismo instante.

Otras cosas que aún me hieren... veré que haré con ellas.

Fue en aquella gaveta en la que uno guarda lo que es mas importante, el amor, la alegría, las sonrisas, un dedito de Fe, para los momentos en que necesite.

Recogí con cariño el amor encontrado, doblé ordenaditos los deseos, coloqué perfume en la esperanza pasé un pañito en el estante de mis metas, y las dejé a la vista, para no olvidarlas.

Coloqué en los estantes de abajo, algunos recuerdos de infancia.

En la gaveta de encima, las de mi juventud y colgado bien a mi frente, coloqué las de mi capacidad de amar y principalmente las de RECOMENZAR.